El pescador de Tres Arroyos logró una de las dos corvinas negras que se dieron en el torneo que organiza el Club Cazadores y que contó con 3137 cañófilos en competencia.


Los balnearios de Claromecó, Reta y Orense recibieron a la legión de pescadores que buscaron inscribir su nombre en la grilla de ganadores de las 24 horas de la corvina negra, el tradicional evento que desde 1962 se desarrolla en el distrito bonaerense de Tres Arroyos. 3137 inscriptos dieron vida a una competencia que, en un día, pasa por todos los climas y obliga al cañófilo a estar muy bien preparado para pasarlo bien y no sufrir el torneo que es organizado por el Club Cazadores de Tres Arroyos y ponía en juego más de $ 180.000.000 en premios, incluyendo en dichas gratificaciones, seis vehículos 0 km.

La actividad dio inicio a las 15 hs del sábado, aunque mucho antes ya la playa se llenó de aficionados que buscaban encontrar el sector más rendidor. Para participar se abonaba una inscripción de $ 110.000, la general, pero ese monto prácticamente se duplicó pensando en la carnada, el combustible y los gastos propios que generan pasar un día a la orilla del mar. Esos costos elevados para la situación del país generaron dudas en la afluencia de cañófilos en esta propuesta piscatoria, pero, una vez más, el pescador respondió y convirtió, una vez más, a la costa en una ciudad, con miles de faroles y luces que iluminaron los cientos de campamentos que se ubicaron en los más de 35 km de cancha. Según el intendente de Tres Arroyos, Pablo Garate, la ocupación este fin de semana fue del 95%, lo que marca a las claras el éxito y la importancia para las economías regionales de las localidades del distrito.

No tardaron mucho en aparecer los comentarios de las primeras capturas, principalmente de chuchos que calificaban para el torneo paralelo de variada y aisladas rubias, aunque la sorpresa fue mayúscula cuando la pieza que inauguró la clasificación fue una corvina negra, especie que se hace desear en los últimos años. En inmediaciones a las Piedras de Franganillo, un pesquero muy rendidor, Agustín Miqueleiz, de Tres Arroyos, lograba un ejemplar de 2,562 kg y se ilusionaba con quedarse con esta 62° edición del torneo. La esperanza se terminó cuatro horas después cuando aparecería la segunda y ultima negra, una pieza de 2,928 kg que logró un experimentado cañófilo local, Pablo Fernández, quien debería sufrir 20 horas hasta que la sirena del final lo hacía acreedor a la camioneta 4×4 y ganador de un concurso muy adentrado en los sentimientos de los pescadores y que sigue creciendo con el correr de los años. El podio lo completó el tandilense Cristian Peralta, con la rubia más grande del torneo, un ejemplar de 3,934 kg.

En dialogo con los medios, Fernández, con su hijo Fermín al lado sosteniendo la llave simbólica de la camioneta, transmitía por su mirada la emoción de ser ganador de una edición de Las 24. “Es algo indescriptible, imposible de explicar, una sensación como pescador increíble. Sacar una corvina negra en este concurso es lo más”, señaló el pescador que participó más de 35 ediciones del torneo y, luego de faltar algunos años, volvió a estar entre los participantes. Llegó en un Renault 9 y se va en una
Con respecto al torneo paralelo a la variada de mayor peso, la incógnita del ganador se develó sobre el final. Darío Germán Marchane, de Coronel Dorrego, con un chucho de 13,720 kg que extrajo a las 13:55 en el Arroyito, se llevó un Toyota Etios 5 puertas 0km. Segundo se ubicó el tresarroyense Alejandro Luna, quien logró esa captura a los 20 minutos de iniciarse el concurso, y terminó siendo superado en la hora final de torneo. Fue un chucho de 12,060 kg, que capturó en el 3º Salto y completó el podio Rubén Omar Boonstra con otro chucho de 11,040 kg. pescado a las 23:15 en el Arroyito.

Tras la pesca la premiación permitió premiar a muchos que no tuvieron suerte con la pesca, pero si por efectos del azar, destacándose el necochense Agustín Villamonte, quien se quedó con otro de los vehículos 0 km por sorteo de pago anticipado, y Juan “Llamarada” Swaels, tresarroyense que ganó con la camioneta a sortear entre los 3.137 aficionados. Bajo la atenta mirada de los participantes y un buen número de medios de todo el país que dieron cobertura al evento, se entregaron casi un centenar de premios, reafirmando un nuevo éxito de una verdadera fiesta de la pesca deportiva que ha crecido, desde aquella primera edición donde se inscribieron 58 personas, ganada por Ever Chachero durante la segunda jornada en 1962, con una corvina negra de 19,300 kilogramos. Un concurso que recién superó las mil cañas en 1978, y llegó al récord de inscriptos en 1987 con 6.862 pescadores, cifra que algunos consideran marca mundial de anotados en este tipo de certámenes.

Principales resultados:

Corvina:
1° Pablo Fernández (Tres Arroyos) Corvina Negra 2,928 kg.
2° Agustín Miqueleiz (Tres Arroyos) Corvina Negra 2,562 kg.
3° Cristian Peralta (Tandil) Corvina Rubia 3,934 kg.
4° Gastón Rossi (Tres Arroyos) Corvina Rubia 3,536 kg.
5° Antonio Gerardo Boreal (Tres Arroyos) Corvina Rubia 3.255 kg.
Todos los clasificados en Corvina.

Variada:
1° Darío German Marchane (Coronel Dorrego) Chucho 13,720 kg.
2° Alejandro Luna (Tres Arroyos) Chucho 12,060 kg.
3° Rubén Boonstra (Tres Arroyos) Chucho 11.040 kg.
Todos los clasificados en Variada.

Por Jorge Virgilio

Pescador y Comunicador de Pesca Deportiva. Tandilense. Conductor de Planeta Pesca en Radio Mitre Tandil. Colaborador Weekend. Fana de Santamarina y Boca.

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